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Apenas a unos días antes de que termine el año, hoy he llegado a la conclusión de que la humanidad se transforma a través de la muerte. Este año todos hemos muerto de una forma u otra, ha habido muerte física y de espíritu, de forma individual y colectiva.

Aprendí que:

  • Se rompió la realidad construida por otros, con mi participación en ella, por elección o por costumbre. Te has preguntado últimamente si ¿Estás feliz contigo misma?
  • Todos somos uno, no importa donde estemos, la cultura, la raza y las creencias. Hay mas cosas que nos unen que las que nos separan.
  • Puedo vivir con miedo o con consciencia. Yo puedo elegir tomar decisiones para mi propio bien y por el bien de los demás o realmente necesito una figura paterna que me diga constantemente como vivir mi vida.
  • Agradezco todo lo que tengo. Ser agradecido con la madre tierra y con Dios abre la puerta hacia la fe y la certeza de que todo está bien, en su justo orden y lugar.
  • Reconozco y agradezco a las personas que ya no están. Me dejaron el mejor regalo de fin de año, a no dar por sentadas las relaciones en mi vida, a ser compasiva y ver el dolor y la desesperación en los ojos de los demás, a recibir y a pedir ayuda, a saber que puedo aprender a vivir desde la calma, sin distracciones y sin expectativas, un recordatorio de que no soy inmortal y que tengo un compás de vida que se llama intuición y trabaja para mí y por mí, para mi evolución, mi paz interna y poder personal.
  • A esta vida vengo a ser feliz con poco, a ayudar a otros, a aprender, a evolucionar y que lo único seguro es el cambio.
  • La capacidad creativa y la sabiduría del ser humano es inmensa y que nada es nuevo bajo el sol.
  • Podemos vivir nuestras vidas alimentando un dolor y una herida que se intensifica con factores externos, es nuestra tarea y deber el romper la vieja narrativa en la que creemos y abrirnos a la posibilidad del cambio y de hacerlo diferente. Todos queremos cambios, pero no somos capaces de recibirlos y reconocerlo en nuestras vidas.
  • La tan anhelada perfección solo existe en nuestras cabezas, que puede convertirse en un mal general y en la desconexión con nuestro espíritu. Sólo se requiere conectar con nuestra verdadera esencia y propósito de vida. La vida no requiere ir a la carrera, en constante competencia, o en lo que se supone que debo tener, lograr, o mantener.
  • NO controlamos nada, ni a los padres, ni a los hijos, ni a nuestras parejas, ningún individuo está diseñado para controlar ni para que lo controlen. Es un lugar insostenible, lleno de demandas y destructivo. Ser y dejar ser.
  • No dejes en mano de otros tu salud espiritual, física y mental. Medita diariamente, consume productos de calidad y con intensión, come saludable y orgánico, pasa más tiempo en la naturaleza y conectando con experiencias de valor, no te compares, prioriza lo que es importante en la vida para ti, crea rutinas diseñadas para ti, busca las herramientas que funcionan para ti y las personas que resuenan contigo, eleva tu alma y tu vibración interna. Reconoce tu cuerpo como el templo sagrado que lleva a tu alma por esta experiencia de vida, trátalo bien, amalo, respétalo y dale descanso, hazte consciente de que para mantenerlo saludable tienes que limpiar tus emociones y no solo cambiar fuera lo que no te gusta de tu cuerpo, si cambias dentro puedes darle a tu cuerpo el valor, el reconocimiento y respeto que se merece. Tu mente no eres tú, es solo una herramienta que trabaja para ti, eres responsable de estar consciente con que se alimenta, es capaz de destruirte o elevarte, eres el responsable de ser consciente si trabaja para ti o contra ti. ¿Puedo amarme y amar a otros incondicionalmente?

 

Manifiesto

  • Me niego a vivir en una realidad construida por otros o por la ilusión construida por mí
  • Me comprometo conmigo a sanar mis heridas y a limpiar mi camino. Cuido mi cuerpo, mente y espíritu
  • Ejercito mi intuición y mi sentir para escuchar mi ser y descubrir mi esencia, mi ritmo individual y encontrarme, florecer, crecer y compartir con otros mis frutos, mis dones y mis conocimientos
  • Enfrento mis miedos, los siento, los reconozco y los libero para poder ver la luz y la abundancia que soy solo por existir
  • No temo expresar mi verdad e ir por lo que quiero
  • Permito dejar ir todo lo que no me conviene
  • Puedo reinventarme cuantas veces sea necesario, salir de la rutina y patrones que limitan mi vida y mi crecimiento
  • Abandono las etiquetas que dan valor a mi vida según mi familia, mi cultura y mis creencias. Soy más que eso
  • Me muestro al mundo tal como soy y comparto mis dones
  • ¡Vivo consciente! Decido que experiencias quiero vivir en mi vida
  • Dejo de buscar en otros lo que necesito darme a mí misma
Mir

Madre, hija, hermana, amante, guerrera, viajera, servidora, escritora y empresaria. Exploradora de la verdad universal y la sabiduría espiritual. Experta en resurgir ante las adversidades de la vida. Creyente en la fuerza interna e independencia que posee cada individuo para sanarse a sí mismo y ser el creador de su propia realidad. Amante de la escritura y la lectura. Yo soy la buscadora de mi verdad y quisiera compartirla con el mundo.